Hoy como ayer, la praxis de Salvador Cayetano Carpio siguen sonando como una música sutil y revolucionaria para hacer posible el sueño de los obreros, la toma del poder.Claro que es posible construir fuera de ese partido político burgués más, una alternativa real para la inmensa mayoría del pueblo.
A 29 años de la desaparición física de Salvador Cayetano Carpio. Algunas reflexiones.Siempre nos toca a los mismos, es decir a aquellos que no tenemos que dar ninguna explicación los que terminamos dando alguna que otra explicación y en el peor de los casos exigiendo alguna. Y es que después de 29 años todavía estamos a la espera de que Salvador Sánchez Cerén dé las explicaciones pertinente, pero reales, de lo que fue la desaparición física del Comandante Marcial, Salvador Cayetano Carpio.
Cómo empezar estas reflexiones cuando todo no está dicho respecto al asesinato-suicidio de Salvador Cayetano Carpio conocido como el Comandante Marcial en el movimiento revolucionario salvadoreño. Extrañas circunstancias entretejen su desaparición física un 12 de Abril de 1983. Tras su asesinato-suicidio se dijeron muchas cosas sobre él. Se mintió y se sigue mintiendo respecto a su persona. Con ello lo único que persiguen es manchar el intachable valor revolucionario que mostró durante el tiempo que convivió y participó del movimiento sindical primero para luego entrar a formar parte de el movimiento popular revolucionario jamás visto en américa latina.
Fue él quien después de estar durante años en la secretaría del Partico Comunista Salvadoreño renuncia del cargo al ver que con el PCS en el país no se iba a conseguir absolutamente nada. Se dio cuenta que era el PCS quien convivía con la burguesía y que ésta lo utilizaba para deslegitimar en el peor de los casos las luchas sindicales y sociales, ese será quizá uno de los motivos por el cual renuncia de la secretaría general. Es así que en 1970 el 1 de Abril y con otros compañeros crea una organización popular de nuevo tipo, las Fuerzas Populares de Liberación, FPL.
Demostraría en tan poco tiempo que fuera del PCS si se podían combinar todas las formas de luchas posibles para la toma del poder. Las leyes burguesas no permitían –ni permiten- que las organizaciones sociales y populares se desarrollen, porque si se desarrollan cobran una fuerza tal que es imposible competir con ese tipo de movimiento revolucionario y de clase. En el marco burgués pues, sólo hay espacio para “las élites políticas”, en ese marco es donde jugaban - y juegan - los partidos políticos de El Salvador, antes el PC y ahora el partido político que se dice de izquierdas FMLN.
Salvador Cayetano Carpio fue quien vino a desenmascarar con su praxis que ese tipo de política es a la que anhelan participar aquellos que se dicen de izquierdas en el peor de los casos “revolucionarios” y los que se venden por unas cuantas monedas. Ese es el motivo principal por el que, quienes se dicen de izquierdas y revolucionarios, quieren participar y formar parte de esa “elite política” que sólo viven de ella para el beneficio propio. Es por tanto la burguesía la que les da de debajo de la mesa lo imprescindible para mantener el statu quo.
Ellos fueron al fin de cuentas quienes lo asesinaron porque sabían que con Salvador Cayetano Carpio al frente del movimiento revolucionario, para ellos, sería un obstáculo. Sí, el suicidio no fue tal, el asesinato los llevaron a cabo todos aquellos que hoy como ayer conciben una manera de hacer política pero en el marco y sólo en el marco de la burguesía.
Si en Europa la social democracia es el invento burgués para deslegitimar a los movimientos de izquierdas. Aquí en el Salvador es el ahora FMLN el invento burgués para deslegitimar a los movimientos populares y revolucionario.
Las reflexiones giran hoy, en este aniversario más, sobre el porqué no debemos de seguir creyendo que no hay alternativa fuera del FMLN. Hoy como ayer, la praxis de Salvador Cayetano Carpio siguen sonando como una música sutil y revolucionaria para hacer posible el sueño de los obreros, la toma del poder. Claro que es posible construir fuera de ese partido político burgués más, una alternativa real para la inmensa mayoría del pueblo. Hoy como ayer, es la praxis burguesa la que deslegitima a sus dirigentes. Quienes creemos en que es posible otro mundo fuera del sistema burgués, Marcial es quien nos da las luces y las líneas a seguir para construirlo sin dogmas pero sí con elementos necesarios para llevar a buen termino el triunfo popular. Es cierto que acabaron con su vida, pero, su legado y sus principios en el marco de la lucha de clases siguen tan vigentes como ayer.
Cuando dejemos de ver al FMLN como un movimiento revolucionario, nos daremos cuenta que fuera de ellos, es posible construir otro movimiento popular de nuevo tipo. Si ayer decían que fuera del FMLN no habían revolucionarios, hoy, arguyen en términos similares que, fuera del FMLN no hay izquierdas. Son los actuales dirigentes quienes determinan qué es y qué no es movimiento, como si ellos son los que detentan las patentes de corzo. Es difícil ver en este partido político a un movimiento de izquierdas, son ellos, precisamente el obstáculo real para llevar a buen término las luchas populares y revolucionarias. Porque sigue como ayer creyendo en el buen corazón de la burguesía y el imperialismo.
Por el rescate de los valores revolucionarios y por la memoria de quien en su día demostró que sí se podía hacer la revolución es que se reflexiona todos los 12 de Abril porque la memoria de Marcial es imprescindibles para seguir creyendo en que fuera del capitalismo existe el socialismo y hacia ello habrá que apuntar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario